Ecologistas en Acción de Sanlúcar ha lanzado una campaña para evitar la comercialización y consumo de aves insectívoras, una práctica que se intensifica en el otoño, fechas en las que estas aves buscan refugio en nuestro territorio.
La organización insta a las autoridades locales y autonómicas, para que aumenten la vigilancia en el campo, sobre todo durante los fines de semanas, días en los que se suelen concentran la mayoría de las salidas para capturar aves insectívoras.
Del mismo modo, solicitan la colaboración de la población, porque la utilización de trampas ilegales, la captura de aves insectívoras, la comercialización de estas especies y su consumo está prohibida por ley, solicitando a los ciudadanos que si observan alguno de estos casos, lo denuncien llamando al número de asistencia ciudadana 112.
El consumo de “pajaritos fritos” está penalizado por la Ley 8/2003 de 28 de octubre, de protección de la Flora y Fauna silvestre. Su captura y comercialización está prohibida, pudiendo imponerse a los infractores multas que alcancen los 60.000 euros.
Las aves insectívoras son especies protegidas y además están consideradas como especies no cinegéticas. Aún así, Ecologistas en Acción denuncia "el beneplácito de la Dirección General de Gestión del Medio Natural, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, por seguir dando respaldo legal a una práctica prohibida en la Unión Europea, vulnerando numerosas Directivas y siendo cómplice de un expolio ornitológico".
"Estas aves son imprescindibles para el mantenimiento del equilibrio ecológico, ya que actúan como auténticos insecticidas biológicos vitales para el hombre y los cultivos agrícolas al controlar el avance de plagas", destacan desde Ecologistas en Acción.
La organización insiste en que su consumo está penado por ley, sin embargo por no estar sometidas a control sanitario, su ingestión puede resultar muy perjudicial para la salud humana debido a los parásitos internos que transportan.
Desde Ecologistas en Acción quieren fomentar la conservación y el respeto para estas aves, por lo que han solicitado ayuda y colaboración de los sanluqueños, para que denuncien a quienes las capturen, comercialicen y consuman como “pájaros fritos”.