La Hermandad Sacramental de los Afligidos cerró este sábado su triduo eucarístico con una procesión por las calles de la feligresía y el Santísimo bajo palio.
Se trata de una procesión eucarística parroquial en la que las dos hermandades de penitencia de la parroquia, como Afligidos y Vera-Cruz, disponen altares a lo largo del itinerario, al igual que Cáritas parroquial, para rezar ante el Santísimo. Una procesión eucarística como las que se celebran en la Sierra de Cádiz en la festividad del Corpus Christi, y que tiene en esta octava de Corpus un referente en el barrio.
A las 19:00 horas se celebró en la iglesia del Santo Cristo la solemne función eucarística, presidida por el director espiritual de la hermandad y párroco del Santo Cristo, Rafael Pinto Vega, con la Coral Logar de la Puente en la capilla musical.
Tras la celebración, tuvo lugar la procesión eucarística por el siguiente itinerario: Plaza Madre Teresa de Calcuta, San Ignacio, Patrona, Bazán, Servando Gutiérrez, Nápoles, Lanza, Calatrava, Profesor Antonio Ramos, Plaza Madre Teresa de Calcuta y recogida en la iglesia del Santo Cristo.
Sin más acompañamiento musical que los cantos y rezos de los feligreses, en una tarde de intenso calor, el Santísimo recorrió las calles bajo palio en un barrio engalanado con gallardetes y cuyas calles contaron cinco altares.
De esta forma, la antigua procesión claustral que hacía Afligidos con el Santísimo, se convirtió hace unos años en esta procesión eucarística, que incluye adoración de los fieles, por las calles, tras la que se lleva a cabo la bendición y reserva.
La cofradía de Afligidos inició el miécoles un triduo que ha estado presidido por José Carlos Mellado González, párroco de San Sebastián, de Puerto Real. La función,celebrada este sábado a las 19.00 horas, estuvo presidida por el párroco del Santo Cristo y director espiritual de la hermandad, Rafael Pinto Vega.
La procesión gozó de un importante silencio y respeto. Recorrió en una hora el itinerario fijado por la organización.