Hay suegra para rato, para mucho viendo a esta suegra que suelta todo su desagrado, infinito, hacia su nuera, a la que dedica toda la actuación y la que no entiende por qué su nieto no hace la Comunión.
Su empecinamiento va más allá recordando la nochevieja con la reunión con la familia política, “el roce no hace el cariño”.
El ingenio que despliega el Selu y su inteligencia con sus letras ejerce de suegra total. Pura envidia. Una relación que no debe acabar bien pero inversamente proporcional a una chirigota que apunta alto por su ingenio y su categoría.