Sporting de Gijón 3
—valencia—Renan, Miguel, Albiol, Marchena, Moretti, Albelda (Edu, m. 75), Manuel Fernández (Baraja, m.59), Joaquín, Mata, Vicente (Morientes, m.46) y Villa.
—sporting de gijón—Cuéllar, Sastre, Gerard, Neru, Canella, Luis Morán (Kike Mateo, m. 88), Diego Camacho, Michel, Diego Castro (Pedro, m.85), Bilic y Barral (Matabuena, m.76).
Árbitro: Paradas Romero.
Goles:
0-1 Luis Morán (m.20)
0-2 Barral (m.52)
1-2 Villa (m.69) p.
1-3 Diego Castro (m.81)
2-3 Mata (m.90)
Incidencias: En los prolegómenos del partido los jugadores asturianos del Valencia David Villa y Juan Manuel Mata obsequiaron a Enrique Castro "Quini" con una camiseta del equipo valenciano con el dorsal nueve, como homenaje al ex delantero del Sporting y el Barcelona, uno de los grandes de la historia del fútbol español.
Un gran partido del Real Sporting de Gijón, que controló el juego de principio a fin, le dio una victoria merecida en su visita a Mestalla, ante un Valencia muy previsible, muy impreciso en ataque y con algunos errores importantes en defensa, pero que pudo igualar en el último suspiro del encuentro.
El conjunto asturiano demostró tener muy estudiado a su rival, al que superó en planteamiento, seguridad y consistencia, a pesar de que el equipo local tuvo el balón durante muchas fases del encuentro, pero sin apenas mordiente.
En el primer tramo del partido, el Valencia llevó la iniciativa, ante un rival que planteó el encuentro con las líneas avanzadas, con la intención de interceptar los pases del rival y con mucha intensidad en los marcajes, los envíos de balones en profundidad y la búsqueda de la espalda de los defensa rivales.
El gol de Luis Morán, que rompió bien el fuera de juego, también rompió al Valencia, que a partir del tanto visitante tuvo más problemas si cabe a la hora de buscar la meta de Cuéllar.
El segundo periodo dio comienzo, por parte local, con la entrada de Morientes en el eje del ataque, lo que desplazó a Mata a la banda y dejó a Vicente en el banquillo.
Una excelente acción individual de Barral puso el 0-2 en el marcador en los primeros compases de la reanudación, lo que no dejó al Valencia más opción que la heroica ante un rival al que todavía no le había creado peligro.
Tras este tanto, el Valencia aumentó su dominio territorial, Sin embargo, en una acción esporádica, unas manos en el área asturiana propiciaron el 1-2. Villa hizo de penalti el gol cien de su historia en Primera División y el partido entró en una nueva dinámica.
El Valencia buscó el empate y dio facilidades en defensa, lo que permitió que el Sporting hiciera un tercer gol -en otra gran acción, de Diego Castro- que no resolvió el encuentro, ya que Mata llegó a hacer un segundo tanto y permitió que el encuentro mantuviera la emoción hasta el último instante.