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Sábado 30/11/2024
 

Málaga

Caneda admite falta de control en el pago de facturas a Art Natura

El ex concejal del PP ha asegurado en la comisión de investigación sobre Art Natura que a su llegada a Cultura, en 2011, se cerró el grifo de los pagos.

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  • Asegura que en su etapa "no se pagó nada" a la empresa
  • "El promotor no quería abrir el museo, sólo quería dinero"

El ex concejal del PP en el Ayuntamiento de la capital, Damián Caneda, ha admitido en la comisión de investigación sobre el proyecto Art Natura la ausencia de controles en pagos que realizó el Ayuntamiento a la empresa al asegurar que “en mi tiempo no se pagó nada” y que denegó muchas facturas por no estar suficientemente justificadas.

Caneda, hoy apartado de la gestión municipal tras sus malas relaciones con el alcalde, pero que estuvo al frente de Cultura en la última etapa del proyecto del Museo de las Gemas y que fue el encargado de sellar su defunción, ha admitido a preguntas de los miembros de la comisión que se encontró al comienzo del 2011 con una práctica generalizada de abonar lo que le presentaba la empresa. “Había una continuidad, y yo quise revisar”

El ex concejal no ha querido acusar directamente a sus anteriores compañeros de gobierno, pero sí ha deslizado que con él cambiaron los métodos. “En lo que a mí respecta no hubo incumplimientos”, ha asegurado en su declaración para añadir que “yo soy yo y mis circunstancias”, en referencia a que empleó métodos distintos en el control. También ha asegurado que en diciembre de 2011 pidió ver las colecciones que iban a llegar a Málaga sólo unos meses despues y no ha logrado explicar si alguien del equipo de gobierno las vio al completo.

El ex concejal ha cuestionado las previsiones iniciales de visitantes al Museo de las Gemas, sobre las que se sustentaron los planes económicos del proyecto. “Eran excesivas”, cree a tenor de estimar unos 600.000 visitantes anuales, el doble de lo que tiene el Museo Picasso, y ha llegado a afirmar que ya informó al alcalde en junio de ese año de los “graves problemas” del proyecto.

A quién sí responsabiliza del fracaso del proyecto es al empresario Fulgencio Alcaraz, del que dijo que no tenía intención de abrir el museo. Caneda ha asegurado que el empresario exigió al Ayuntamiento 2,8 millones de euros  para rescindir el contrato. “No dio opción a que se arreglaran los problemas. Pidió dinero por irse y eso era ilegal”, ha precisado. Y ha admitido que el empresario “intentó pasar facturas” al cobro de publicidad en contra del Ayuntamiento.

También ha reconocido que el consistorio siguió adelante promocionando el Museo en época electoral pese a que ya se barruntaba su fracaso desde el 2008 y ha reconocido sus dudas sobre si él habría aceptado la llegada de Art Natura a Málaga. En lo que sí ha exculpado al consistorio es de no haber roto el contrato de forma unilateral. “No podíamos dejar de pagar nuestra parte”, ha dicho en alusión al canon anual fijado a la empresa. “Hasta el último momento el Ayuntamiento cumplió”, ha dicho.

Tras las declaraciones del ex concejal ha sido el turno de Javier Ferrer, gerente de Alcaldía en el momento en que se gestó la llegada del Museo y al que su promotor situó como un hombre clave en las negociaciones. Con una clara pérdida de memoria, Ferrer ha eludido las preguntas más polémicas, pero ha reconocido que estuvo en las primeras reuniones, en Valencias, previas al contrato y que llegó a ver sólo una de las salas donde se exponían las gemas en la Ciudad de las Artes de esta ciudad. 

Ha rechazado que interviniera directamente en la negociación –“acompañaba al alcalde”-, ha evitado pronunciarse sobre la intervención del ex secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, pero sí ha admitido que el proyecto Art Natura fue un proyecto “excepcional y singular”, para explicar porqué el contrato se hizo sin avales ni garantías del empresario.

Así ha explicado a preguntas de la comisión que los 60.000 euros pactados al año en pagos de la empresa para actividades culturales no fue una práctica habitual en otros proyectos y que iban dirigidos a “fomentar los contenidos culturales” de la zona donde se iba a asentarse el Museo, en la Carretera de Cádiz, una suerte de “patrocinio”.

La comisión de investigación seguirá en julio con las declaraciones de nuevos protagonistas. En la sesión de este jueves han evitado comparecer Miguel Ángel Cortés, y el subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones

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