Artistas y líderes opositores venezolanos animaron este domingo el concierto "Un Grito por la Libertad", realizado en Caracas en apoyo a una amnistía a favor del encarcelado dirigente Leopoldo López y otros que el antichavismo llama "presos políticos".
En el acto, organizado por Lilian Tintori, esposa de López, líder del partido Voluntad Popular encarcelado hace dos años y sentenciado luego a catorce de reclusión, destacó el discurso del titular del Legislativo, Henry Ramos Allup, quien arremetió contra el presidente, Nicolás Maduro, a quien pidió dar un paso al costado.
"Este es un régimen de canallas, de ladrones y narcotraficantes (...); le hemos dicho a Maduro que dimita, que por lo menos tenga un acto de consideración con el pueblo, de expiación para pedir perdón por estos 17 años de tragedia", dijo Ramos Allup en alusión a su Gobierno y al de su mentor y antecesor, Hugo Chávez (1999-2013).
"No queremos que haya en Venezuela una confrontación" violenta, añadió tras confirmar que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), alianza que aglutina a los principales partidos opositores, elegirá este mismo mes alguna vía para intentar adelantar a este año el fin del Gobierno de Maduro.
La MUD acordó que a mediados de 2016 definiría la "vía pacífica, constitucional, democrática y electoral" que activará para intentar adelantar el fin de Maduro, aunque varios dirigentes han anunciado que esa definición se producirá este mismo febrero.
La renuncia, la enmienda constitucional y un referendo revocatorio del mandato figuran entre las principales alternativas.
Además de la manifestación opositora de Caracas, el candidato de la MUD en las dos últimas elecciones presidenciales, Henrique Capriles, cumplió este sábado su segundo día de recorrido por el interior del país promocionando en otras manifestaciones el referendo como la vía más expedita.
"Hay que salir a buscar las firmas para revocar a Maduro", exhortó Capriles a sus seguidores en una manifestación en el estado Mérida (noroeste), en alusión a las rúbricas de al menos un 20 % de los electores necesarias para pedir el referendo al ente electoral.
Se requieren poco menos 3,9 millones de firmas de electores para solicitar la convocatoria de un referendo revocatorio del mandato de Maduro, elegido en 2013 para un periodo de seis años.
"Mucha gente dice que la oposición no puede dar el espectáculo de presentar diferentes alternativas (...); nos vamos a poner de acuerdo con toda Venezuela respaldándonos", añadió Ramos Allup.
También dio por descontado de que en los próximos días se aprobará la llamada Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional en beneficio de López y de otros alrededor de 800 "políticos presos por delitos comunes", según la definición del Gobierno.
En la unicameral Asamblea Nacional (AN, Parlamento), con dos tercios de diputados opositores tras los comicios legislativos de diciembre pasado, "hay mujeres y hombres que tenemos ovarios y testículos" para aprobar la amnistía, subrayó Ramos Allup.
El titular del Legislativo dijo conocer que en el Judicial, al que le achaca ser sumiso a Maduro, "están elaborando una nueva sentencia, si así se puede denominar a la perpetración del delito, mediante la cual se pretende regular la comparecencia" de ministros ante los diputados.
Pretenden así, remarcó, privar al Legislativo "de nuestra facultar de citar a ministros" para que expliquen su labor.
Ramos Allup también aseguró que en la Fuerza Armada "hay tres grupos conspirando contra el Gobierno" y otros cuatro dentro de las filas civiles del oficialismo "que le están pidiendo la renuncia a Nicolás Maduro".
"Estemos preparados para cualquier cosa", exhortó a las decenas de manifestantes congregados en una zona del este de Caracas hasta entrada la noche.
El inicio de la actividad opositora capitalina coincidió con un enlace obligatorio de emisoras de radio y televisión ordenado a la misma hora por Maduro.
Los venezolanos "están en la calle estudiando la agenda económica bolivariana", sostuvo el mandatario en una alocución que comenzó con oficialistas gritando la consigna "Uh, ah Maduro no se va" y terminó con el gobernante firmando el decreto de un aumento de un 52 % del salario mínimo a partir del próximo 1 de marzo.
La mejora la anunció el miércoles pasado junto a un alza de los precios internos de la gasolina, entre otras medidas, antes de que el jueves se informara de que 2015 registró una inflación nacional del 180,9 %, la más alta en toda la historia venezolana.
El jefe de Estado advirtió que sus opositores buscan sacarlo de la jefatura del Estado para "arrebatarle al pueblo sus derechos".
