Participa Sevilla defenderá en el próximo pleno del Ayuntamiento hispalense una moción que reclama la ejecución de una sanción de 33.022 euros acordada en febrero de 2015 contra el Real Club Pineda, a cuenta del funcionamiento de actividades sin licencia, demandando además el cumplimiento de las medidas paralelas que determinan la "suspensión" de las actividades no legalizadas por el club, pues desde diciembre media una resolución al respecto que es ya "firme en la vía administrativa".
La moción, recogida por Europa Press, expone que el Real Club Pineda es "un exclusivo club deportivo" fundado en 1940 y que, dentro de sus cerca de 80 hectáreas de extensión, ofrece a sus socios actividades de hípica, golf, pádel, tenis, frontón, futbito, cross, croquet, juegos de salón, natación y fitness, junto a "actividades sociales". Todo ello, en instalaciones como "un hipódromo, un campo de golf de 18 hoyos, diez pistas de tenis, 13 pistas de pádel, una de frontón, dos pistas de futbito, una de croquet, piscinas cubiertas y al aire libre, spa, gimnasio, "once puntos de restauración", restaurante, cafetería y "salón para eventos con capacidad para 500 personas".
Pero según la moción, "hasta 2007" semejante complejo funcionaba sin "ninguna licencia para las actividades realizadas", pues en febrero de 2015 el Servicio de Protección Ambiental del Ayuntamiento certificó que fue en noviembre de 2007 cuando se concedió "la primera licencia de apertura" de la que media "constancia" en este complejo. Dicha licencia legalizaba las actividades de "piscina, club social, gimnasio, comedor y cocina", si bien en mayo de 2014 una inspección daba cuenta que en ese año esa licencia seguiría siendo la única en vigor, aunque habría "otros tres expedientes en trámite".
"NINGUNA DOCUMENTACIÓN"
La mencionada inspección de 2014, según la moción de Participa, constataba que funcionaban "sin ningún tipo de documentación" un club social con restaurante, cafetería, cocinas, sala de juegos, oficinas y tienda; un hipódromo con tribuna y bar; pistas de tenis, pádel y frontón; un campo de golf; "boxes antiguos" con instalaciones propias; "nuevas pistas de futbito"; naves de mantenimiento e incluso una "gasolinera", todo ello "en funcionamiento".
Dado el caso, en febrero de 2015 el Servicio de Protección Ambiental del Ayuntamiento emitió una resolución proponía "una sanción de 33.022 euros" y la suspensión provisional de las actividades no legalizadas "advirtiendo del carácter ejecutivo de dicha orden y de la notificación a la Policía Local para que, en caso de no realizarse voluntariamente, se proceda a su ejecución forzosa".
Pero según la moción de Participa, una nueva inspección en junio de 2015 puso de relieve que las instalaciones, "todas" ellas, estaban "abiertas y en funcionamiento" y hasta entonces sólo se habían "presentado una serie de declaraciones responsables para la legalización de una parte de las instalaciones, estando aún en trámite las de la zona del hipódromo y sin que se haya tramitado ninguna para la legalización de las oficinas, naves de mantenimiento, gasolinera y nave de almacén de paja y semilla".
ALEGACIONES "DESESTIMADAS"
Es más, avisa Participa de que entre febrero y diciembre, el área de Medio Ambiente ha dictado "dos nuevas resoluciones desestimando las alegaciones presentadas (por el club) y ratificando tanto la sanción como la orden de suspensión de las actividades", siendo la más reciente de las resoluciones, fechada en diciembre, "firme por la vía administrativa". Pero a pesar de todo esto, "no tenemos constancia de que se hayan cumplido estas resoluciones", por lo que la moción pide "el cumplimiento de las medidas dictadas "especialmente en lo referente a la inmediata suspensión de aquellas actividades no legalizadas", así como "un nuevo expediente sancionador por el incumplimiento reiterado de la orden de suspensión de las actividades".
Susana Serrano, portavoz de Participa Sevilla, ha manifestado al respecto que este caso prueba el "trato desigual" que el Ayuntamiento hispalense depara "a unos negocios respecto a otros", porque "cualquier bar pequeño de Sevilla que no tuviese licencia sería cerrado y sancionado inmediatamente", mientras el club Pineda "lleva tantos años así", en una situación reconocida por el anterior alcalde, Juan Ignacio Zoido (PP), quien incluso "hablaba de que esto pasa en la mayoría de clubes deportivos de Sevilla".
"El club Pineda sigue sin contar con todas las licencias. Aunque se han legalizado algunas actividades, quedan muchas por regularizar", ha dicho.