La Junta de Gobierno Local ha aprobado acogerse a un Fondo Extraordinario del Ministerio de Hacienda para reducir el periodo de pago a los proveedores y para cancelar deudas pendientes con la Seguridad Social y Hacienda. Se trata de un adelanto de 15,8 millones de euros de los tributos del Estado con los que se va a hacer frente al pago de proveedores, a los que se les va a abonar sus deudas en un periodo menor de 60 días, y para pagar parte del “lastre” de gobiernos anteriores de Seguridad Social y Hacienda, todo ello con mejores condiciones que las actuales –entre 2,3 y tres puntos menos-, en diez años de plazo con dos de carencia.
Según ha explicado la delegada de Economía y Hacienda, Inmaculada Muñoz, el Ayuntamiento esta equilibrado presupuestariamente y se ha reducido el remanente negativo de tesorería en 40 millones, pero existen problemas de liquidez agravados en los últimos años por la “nefasta gestión de la recaudación por parte de Diputación” durante los últimos cuatro años.
“Y por eso nos vemos obligados, digo bien, obligados, a poner en marcha esta medida, para protegernos de cara al futuro, antes de que el Gobierno del PP y Montoro empiece a mandarnos cartas, como a otros ayuntamientos de la provincia, amenazándoles de que les van a quitar los tributos para pagar a proveedores y generando un problema mayor con el impago a los empleados municipales”, señaló.
Muñoz lamentó que en el Pleno celebrado esta mañana PP, IU y Por Sanlúcar sí se Puede votaran en contra, y mostró su sorpresa por el hecho de que el PP vote hasta en contra de medidas de su gobierno. En este sentido pidió a la portavoz, Ana Mestre, de la que dijo que se expresó de manera “inusual”, que, “si con esta medida dice que solo queremos salvar los muebles, que le diga a su partido que apruebe una nueva ley de financiación de los ayuntamientos que acabe con este parcheo y con los chantajes, y ya verá como no nos tenemos que acoger a ningún fondo”.
Porque además, Muñoz recalcó que el problema que se ha generado es doblemente culpa del PP. Por un lado, por generar más de 108 millones de deuda en el Ayuntamiento tras 8 años de gestión, “deuda que generaron y no pagaron”, y por otro, porque la falta de liquidez se debe a que los últimos cuatro años de recaudación con el gobierno del PP en Diputación ha sido nefasta. Por eso no entendemos la negativa, porque en lugar de echar un mano, votan en contra”.
“De nuevo es el gobierno de esta ciudad es el que asume la responsabilidad ante el intento de bloqueo de la oposición”, dijo la responsable municipal, quien lamentó que a estos partidos les dé “coraje” que a la ciudad le vaya bien.
