Un mal día lo tiene cualquiera

No fue la mañana del Fundación Cajasol Sporting. Las chicas entrenadas por Antonio Toledo perdieron el primer partido de la temporada, y lo hicieron con justicia por deméritos propios y méritos de su rival, el UGD Tenerife, que llegó a Huelva sin complejos y se impuso en un choque que no estuvo exento de polémica y en el que, pese a todo, las onubenses tuvieron sus opciones para no irse de vacío.
   Quizá todo hubiera sido diferente si nada más comenzar el partido el Sporting hubiera aprovechado una clamorosa ocasión de gol. Fue en el minuto uno cuando Martín-Prieto inició una galopada por banda derecha que culminó con un pase medido para Vero Napoli. La italiana quedó mano a mano con Noelia, la quiso batir con tiro cruzado por abajo, pero la portera del cuadro insular reaccionó perfectamente y la ocasión quedó en nada.
   A partir de ahí el dibujo del partido comenzó a tomar forma. El Granadilla Tenerife se hizo con la posesión del balón y empezó a sacar provecho de la superioridad que lograba por banda derecha con las continuas incorporaciones de Estella. Por suerte para las locales, la defensa sportinguista sabía reordenarse con rapidez y no dejaban que el peligro pasara a mayores. Pero con el balón en los pies, muy poca cosa. La lucha en el centro del campo la ganaban las tinerfeñas, y a las onubenses les quemaban demasiado el balón en los pies.
   Con esta inercia de juego, el Tenerife entró en el último tramo de la primera parte casi asediando el área albiazul, jugando demasiado cerca de Sara Serrat y haciéndose merecedor de irse al descanso con ventaja. Algo que no ocurrió, ya que el Sporting acabó la primera parte como la empezó, con una clara ocasión de gol. La tuvo Virgy en el 44’ tras un lanzamiento de falta prolongado en el área; el balón lo controló la centrocampista sportinguista y lanzó un potente tiro cruzado que salió rozando el poste derecho de Noelia. Fue la última acción de la primera mitad. La segunda arrancó con la misma tónica de juego que la primera, pero ahora sí, el conjunto visitante sacó provecho a su mayor dominio de la posesión. Minuto 54. 0-1. Todo nace de un córner provocado por un paradón de Sara Serrat tras un lanzamiento de falta de María José. En ese saque de esquina, Sara dejó su paradón en nada porque falló al blocar el balón y en medio de una maraña de jugadoras, el árbitro vio unas manos más que dudosas y señaló penalti. María José lo marcó.
   El gol acomodó aún más a las tinerfeñas, y el Sporting no encontraba la fórmula para enlazar jugadas que llevaran peligro. Pese a ello, la casta y el carácter del Sporting le llevó a minutos de impulso en el último tramo. Martín-Prieto la tuvo en el 70’, pero llegó forzada a un mano a mano y su intento de vaselina se fue desviado. En el 80’ fue Sandra la que rozó el empate, pero su remate chocó contra la mano de una defensora insular. Sin embargo, en esta ocasión para el árbitro no fue penalti. Y en pleno arrebato del Sporting, apareció María José para dictar sentencia. Minuto 86. 0-2. La delantera tinerfeñista se lo guisó y comió ella solita para recuperar el balón, avanzar, driblar a dos defensas albiazules, colocarse el balón en posición de disparo con la pierna derecha y cruzarla a la perfección. Punto y final. Primera derrota del Sporting tras cuatro jornadas ligueras.