Agentes de la Policía Nacional, en una operación enmarcada dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos, han desarticulado un grupo que explotaba sexualmente a mujeres en clubes de alterne de Gran Canaria, procediendo a la detención de un total de nueve personas y a la liberación de dos chicas.
Según informa la Dirección General de la Policía, la investigación comenzó tras la denuncia de una joven rumana que aseguraba ser víctima de un delito de trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Las Palmas de Gran Canaria.
La chica relató que cuando faltaba un mes para que cumpliera la mayoría de edad, el principal investigado de la red comenzó a presionarla para que se trasladara a España desde Rumanía con la promesa de una vida mejor junto a él y asegurándole que ambos tendrían más oportunidades de encontrar un buen trabajo.
Aquí, su objetivo era captarla y separarla de su familia para que, una vez en nuestro país, pasase a ser explotada sexualmente, un 'modus operandi' para la captación conocido como 'Lover boy'.
Una vez cumplida la mayoría de edad de la víctima, comenzaron los trámites necesarios hasta la compra de los billetes de avión para trasladarla al país, donde les esperaban el resto de miembros de la organización.
UNA VEZ EN LA ISLA FUE OBLIGADA A PROSTITUIRSE
Ya en Gran Canaria, la joven comenzó a ser controlada día y noche por los componentes del grupo y obligada a ejercer la prostitución, impidiéndole comunicarse por teléfono con sus familiares y retirándole todo el dinero que generaba con la prostitución, todo en beneficio exclusivo de sus proxenetas.
Por su parte, los agentes pudieron confirmar la existencia de la red, que mantenía una estructura estable en la isla y con funciones perfectamente definidas entre sus miembros. Su medio de vida consistía exclusivamente en la explotación sexual de sus víctimas en casas de Las Palmas de Gran Canaria.
Con todo, los agentes identificaron y localizaron a todos los componentes de la trama y la investigación culminó con la detención de nueve personas, cinco de nacionalidad rumana, tres de nacionalidad española y uno de nacionalidad colombiana.
EL GRUPO GANÓ 1,3 MILLONES EN UN AÑO
Además, se realizaron cuatro registros: dos en clubes y otros dos en domicilios en los que se han incautado 3.750 euros en efectivo, 10 bolsitas termoselladas con cocaína, documentación de las víctimas, documentación relacionada con la explotación sexual, envíos de dinero y material informático. Se calcula que, en tan sólo un año, habían obtenido 1.300.000 euros aproximadamente con su actividad ilegal.
La investigación policial ha sido llevada a cabo por agentes adscritos al Grupo VII de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos y el Grupo IV de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Las Palmas.