Una joven que había sido captada con 16 años en Rumanía y explotada sexualmente en un club de alterne próximo a Figueres ha sido liberada después de que denunciase su caso a través de una dirección de correo electrónico habilitada por la Policía Nacional para luchar contra la trata.
Según informa este cuerpo policial, los agentes han rescatado también a la hija de ocho meses de la mujer, con la que el proxeneta y su familia la amenazaban para que se prostituyera.
La joven había sido captada con 16 años en su país por el método conocido como "lover boy", que consiste en que un hombre seduce a la víctima y, posteriormente, la traslada al lugar donde será explotada sexualmente.
En el club de alterne de Figueres, la joven fue obligada a prostituirse durante cuatro años y, tras quedarse embarazada de su proxeneta, que ha sido detenido, regresó temporalmente a Rumanía.
Cuando la bebé contaba con tres meses, la joven regresó a España bajo la amenaza de que le causarían daños a su hija y, una vez aquí, contactó con la policía a través del correo electrónico trata@policia.es.
Una vez comprobada la veracidad de los hechos manifestados por la víctima, los agentes la liberaron a su salida del club de alterne cuando su proxeneta se disponía a trasladarla al domicilio donde se encontraba el bebé, que también ha sido rescatado.
La mujer era controlada por las dos hermanas del presunto explotador y obligada al regresar al domicilio a realizar las tareas domésticas, así como a venderle cocaína a los clientes en el prostíbulo.
La joven tenía que entregar los ingresos que obtenía para pagar los gastos de alquiler del inmueble donde vivía el clan familiar y asegura que, durante cuatro años, recaudó más de 300.000 euros.
El regreso a Rumanía para tener a su hija tuvo lugar el pasado año y este 2015 volvió a España ante las amenazas que recibió en caso de no someterse de nuevo.
Esta operación, que se ha saldado con la liberación de la madre y su hija, se enmarca en el plan de la Policía Nacional contra la trata de seres humanos que arrancó en 2013 y que, desde enero de este año, ha puesto en marcha una campaña de concienciación en redes sociales y medios de comunicación.
