Una niña discapacitada de doce años -con transtorno madurativo y con una edad mental de siete- se encuentra en el limbo de la burocracia educativa al no tener su familia constancia de en qué centro debe estar el próximo curso, y con un dictamen educativo que la sitúa en el nivel D, el grado máximo de discapacidad, lo que implicaría su ingreso en un centro especializado. La Consejería de Educación, sin embargo, lo niega y asegura que tiene centro asignado, con aula especial y con dictamen C.
La denuncia pública la interpone la madre de la menor, Hortensia Barrionuevo, quien asegura que desde noviembre lleva reclamando al colegio La Raza, en el que ha estudiado la menor con un dictamen B (con apoyo variable según objetivos) desde que comenzó sus estudios, que repita curso al no haber conseguido los objetivos y que no pase a 1º de Secundaria.
Dictamen de la discordia
La alumna, sin embargo, ha superado el curso y fue objeto de un dictamen que la evaluaba en el nivel D, según la documentación que aporta su madre, que asegura que ni La Raza ni el IES Punta del Verde (centro adscrito al anterior) la incluyen ni en el listado de admitidos ni en el de no admitidos.
Barrionuevo, que recalca que ha realizado toda la tramitación exigible en tiempo y forma, asegura además que no se oyó a los familiares, como dice la normativa, a la hora de realizar el dictamen y que tampoco se ha aceptado su traslado al colegio concertado María de las Mercedes, donde estudia el hermano de la menor.
Fuentes de la Delegación Territorial de Educación han negado todos estos extremos y aseguran que la alumna está inscrita con el dictamen C en el IES Punta del Verde, que posee un aula específica para atenderla, y que la familia no acudió a la revisión que se solicitó del dictamen.
Apuntan que se denegó el traslado de la menor al María de las Mercedes al no contar ese centro concertado con un aula específica, recalcando que la normativa indica que se reubica a los alumnos en el centro más cercano que posea los recursos educativos que requiere el discapacitado.
Comunicación oficial
Ante esta respuesta, Barrionuevo ha asegurado que ha vuelto a acudir a los centros y que no aparece su hija en ningún listado, exigiendo a la Administración que comunique formalmente que el dictamen recoge la calificación de C en lugar de la D que aparece en sus documentos y que, si es cierto que está en el Punta del Verde, que aparezca en los listados públicos, ya que asegura que la propia directora del centro le comunicó que su hija no estudiaría allí, “probablemente por cuestiones de ratio”, apunta.
Mientras, los plazos se acaban y el próximo día 25 de junio terminará el de reclamación de los centros asignados para el próximo curso sin que la menor, o al menos su familia, tenga comunicación formal y por escrito del centro al que debe acudir y cuál es la verdadera calificación que recoge el dictamen educativo realizado.