El PP de Granada ha acusado este martes de "despilfarro" al Patronato de la Alhambra y el Generalife por la adquisición reciente de una veintena de piezas por más de 250.000 euros, y ha solicitado que el Ayuntamiento de Granada y el Estado formen parte del control de cuentas en el monumento, para evitar que "se financien caprichos".
En rueda de prensa, el concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Granada y miembro del patronato, Juan García Montero, ha lamentado que la compra de estas piezas no se haya puesto en conocimiento de los integrantes del órgano que gestiona la Alhambra, y que haya sido producto del "capricho" de su directora, María del Mar Villafranca, que ha hecho, en su opinión, "hacer el ridículo" al consejero de Cultura, Luciano Alonso.
Para García Montero, se trata de "un capítulo más de la larga historia de la Alhambra", con "entradas que no existen o con accesos más allá del cupo", un lugar "donde los caprichos son más importantes que los criterios objetivos". A su juicio, los 250.000 euros, dada la actual situación económica, se podrían haber invertido en otras cuestiones relacionadas para mejorar el patrimonio de la ciudad, como en el barrio del Albaicín, y no para "adquirir piezas y guardarlas en almacenes".
De hecho, el concejal se ha preguntado "a quién se han comprado estos bienes, quién lo ha autorizado, y quién se ha encargado de la tramitación administrativa, qué técnico ha tasado estos bienes, y de qué partida presupuestaria ha salido este dinero para financiar los caprichos de María del Mar Villafranca".
Por ello, el PP va a solicitar formalmente y por escrito contestación como miembros del Patronato la información al respecto, y, una vez analizada, exigirán responsabilidades políticas si las hubiera. Asimismo, "ante tal desatino de la gestión", van a pedir que el Ayuntamiento y el Estado formen parte del control de cuentas de la Alhambra.
Por su parte, la parlamentaria andaluza del PP Marifrán Carazo ha considerado que en esta caso el Gobierno andaluz ha mostrado su "auténtica cara" ya que "nos tiene acostumbrados al despilfarro y a una gestión basada en la gestión del chiringuito", y ha criticado que la Junta de Andalucía congele salarios a funcionarios o no abone las nóminas a los trabajadores del Centro Albayzín cuando se gasta tales cantidades en la adquisición de piezas.
