El Papa Francisco ha pedido a los obispos españoles, a los que ha recibido este lunes en audiencia, que no olviden la historia de España ahora que "sufren" la "indiferencia de muchos bautizados" y una cultura "mundana, que arrincona a Dios en la vida privada".
"Ahora que estáis sufriendo la dura experiencia de la indiferencia de muchos bautizados y tenéis que hacer frente a una cultura mundana, que arrincona a Dios en la vida privada y lo excluye del ámbito público, conviene no olvidar vuestra historia. De ella aprendemos que la gracia divina nunca se extingue y que el Espíritu Santo continúa obrando en la realidad actual con generosidad", ha subrayado.
Según ha recordado Francisco, en España "arraigó muy pronto la Palabra de Dios, que ha dado frutos de concordia, cultura y santidad". Además, ha señalado que las palabras del cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela, ponen de manifiesto su empeño de servir fielmente a su pueblo.
"Lo queréis resaltar de manera particular con la celebración del ya cercano V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús, primera doctora de la Iglesia", ha destacado el Pontífice.
El Papa ha admitido que en el momento actual "las mediaciones de la fe son cada vez más escasas y no faltan dificultades para su transmisión". Por ello, ha exhortado a los obispos a estar en un estado de misión permanente, "para llamar a quienes se han alejado y fortalecer la fe, especialmente en los niños".
En este sentido, les ha pedido que presten "una atención particular" al proceso de iniciación a la vida cristiana pues "la fe no es una mera herencia cultural, sino un regalo" y les ha recordado que esto requiere "un anuncio incesante y animación constante", para que el creyente sea "coherente" con la condición de hijo de Dios que ha recibido en el bautismo.
Además, ha remarcado que despertar y avivar una fe sincera, favorece la preparación al matrimonio y el acompañamiento de las familias, "cuya vocación es ser lugar nativo de convivencia en el amor, célula originaria de la sociedad, transmisora de vida e iglesia doméstica donde se fragua y se vive la fe". Para Francisco, una familia evangelizada es "un valioso agente de evangelización" que "promoverá el nacimiento de vocaciones al seguimiento del Señor en el sacerdocio o la vida consagrada".
Francisco también ha invitado a los prelados españoles a anunciar de forma "valiente y veraz" el Evangelio, a cuidar "con esmero" su crecimiento con el ejemplo, la educación y la cercanía, a no excluir a nadie y a escuchar a todos "de corazón a corazón, con ternura y misericordia".
RECONOCIMIENTO A CÁRITAS ESPAÑOLA
Asimismo, ha subrayado que la Iglesia "nunca puede olvidar" a las personas más desfavorecidas" ni, por tanto, su amor y servicio a los pobres. "Sé bien que, en estos últimos años, precisamente vuestra Caritas --y también otras obras benéficas de la Iglesia-- han merecido gran reconocimiento, de creyentes y no creyentes. Me alegra mucho", ha apuntado.
Además, ha subrayado que el obispo no debe sentirse "solo" pues tiene a sus colaboradores más directos, los sacerdotes, a las personas consagradas y a los laicos, "que desde las más variadas condiciones de vida y respectivas competencias llevan adelante el testimonio y la misión de la Iglesia".
Precisamente, ha recordado el documento de la CEE 'Vocaciones sacerdotales para el siglo XXI', para indicar que la pastoral vocacional es "un aspecto que un obispo debe poner en su corazón como absolutamente prioritario, llevándolo a la oración, insistiendo en la selección de los candidatos y preparando equipos de buenos formadores y profesores competentes".
El Papa Francisco ha agradecido a los prelados españoles su servicio a la Iglesia, les ha pedido que sigan "adelante con esperanza", que mantengan "una colaboración franca y fraterna" en la CEE así como un "apoyo recíproco". También les ha pedido que lleven "a los queridos hijos de España un especial saludo del Papa", que les suplica que recen por él y les imparte su Bendición.