La plaza de abastos Jerez Sur, de Federico Mayo, no abrirá sus puertas hasta “finales de marzo o principios de abril” a pesar de que el edificio fue inaugurado por la alcaldesa, María José García-Pelayo, el pasado 23 de diciembre. El problema es que si bien el equipamiento está ya preparado para recibir a los comerciantes, éstos no han encontrado aún la financiación necesaria para adquirir la maquinaria que precisan para atender a sus clientes.
Eduardo Ponce, que es el portavoz de los comerciantes de esta plaza de abastos, estima que el coste de adecuación de los diferentes negocios oscila entre los 15.000 euros de las carnicerías a los “6.000 ó 7.000” de las pescaderías, una cantidad de dinero actualmente inasumible para unos profesionales que en estos últimos años han debido tirar de sus ahorros para salir adelante.
Además, el Ayuntamiento todavía debe sacar a subasta tres puestos que hasta ahora no han sido adjudicados a ningún emprendedor.
Con todo, Eduardo Ponce se muestra optimista al respecto de que en estas próximas semanas puedan fructificar las negociaciones que se vienen llevando a cabo con distintas entidades bancarias de cara a garantizar la financiación del traslado, confiando incluso en que los afectados puedan acogerse a subvenciones del Plan Urban.
Los comerciantes de la plaza de abastos de Federico Mayo no están ahora preocupados por su futuro, ya que son conscientes de que se encuentran en la recta final de esta larga travesía del desierto. “Ahora vemos que esto va de verdad hacia adelante, no es como otras veces y si hemos aguantado cuatro años no nos vamos a venir abajo por esperar mes y medio”, asegura. Ponce admite por último que el Ayuntamiento está poniendo de su parte para que el nuevo mercado abra cuanto antes sus puertas.