La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a 21 años de prisión a A.P.E. acusado de asesinar en julio de 2004 a Carmen L.S. por encargo de su exmarido y ser el autor de los cinco disparos que efectuó cuando la mujer se encontraba trabajando en compañía de su hijo menor de edad y de un hermano, entre otros, en una finca de su propiedad ubicada en el paraje El Rebeque, en El Ejido.
Fuentes judiciales han indicado a Europa Press que al acusado se le ha impuesto una pena de 20 años de prisión por un delito de asesinato y un año más por tenencia ilícita de armas, toda vez que la fiscal solicitó para el 22 años y seis meses de prisión después de que el jurado popular apreciase en su veredicto dilaciones indebidas.
Los hechos probados consideran acreditado que A.P.E. fue el autor material del crimen a cambio de precio después de tres sesiones de juicio si bien ha estimado que concurre la atenuante de dilaciones indebidas que interesó la defensa, que ya ha anunciado la interposición de un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Han tenido en cuenta como principales pruebas de cargo el hallazgo de su huella dactilar en el interior de vehículo en el que llegó junto al exmarido al lugar donde se perpetró el asesinato y su reconocimiento en rueda por parte del hermano de la víctima.
El instigador del crimen, Antonio Felipe C.C., de 47 años, se encuentra actualmente cumpliendo una condena de 15 años de cárcel después de que reconociese en un juicio celebrado en 2007 haber pagado a una tercera persona para que matase a su exmujer después de que ella le denunciase por abusos deshonestos a su hijo.
Ni ante la Guardia Civil ni ante el juez reveló la identidad del sicario, quien, con una escopeta de caza del calibre 12 milímetros, abrió fuego contra víctima a una distancia de entre dos y cinco metros desde un vehículo en el que viajaba también Antonio Felipe C.C.
El autor material de la muerte negó en la primera sesión la vista oral con tribunal de jurado ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, su participación en el asesinato y proclamó una y otra vez a preguntas de las acusaciones y de su defensa su "inocencia". "En ningún momento estuve allí, no conozco a Antonio Felipe, nunca he usado armas y estoy aterrorizado porque me acusan de cosas que no he cometido", aseguró para, a continuación, lamentar no ser "capaz de demostrar que soy inocente".
A.P.E., quien fue detenido en 2011 cuando, al renovar su DNI, sus huellas mostraron coincidencia con una dactilar que se encontró en el turismo desde el que se cometió el crimen, relató que, en 2004, residía con su madre en la barriada de San Agustín de El Ejido (Almería) y trabajaba eventualmente "haciendo chapuzas" y sufría una adicción a cocaína y a heroína que la fiscal relacionó en sala con el hecho de que necesitase dinero y accediese a quitarle la vida a Carmen L.S.
El acusado vinculó esa huella a que era "amigo del hermano del dueño del coche" y que "a veces" se metía en su interior "a fumar", así como a un supuesto pasado en el que cometía "hurtos de cassettes" para ganar dinero extra. Con respecto al hecho de que fuera señalado por el hermano de la víctima, testigo presencial del crimen, en una rueda de reconocimiento efectuada en 2011 tras su arresto y siete años después de que se perpetrase en asesinato, según remarcó la defensa, aseguró que "quizá fuera la Policía la que les dijo que me señalarán".