El portavoz socialista del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, ha manifestado este jueves que el alcalde, Juan Ignacio Zoido (PP), debe prestar "la misma atención" a las advertencias de la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Educación y la Cultura (Unesco) sobre los efectos medioambientales del dragado de profundización planeado para el río Guadalquivir, que la prestada en el caso del conflicto de la torre de 178 metros de altura que se construye en la isla de la Cartuja.
La Unesco, en el seno de la XXXVII sesión de su Comité de Patrimonio Mundial, ha ratificado su apercibimiento a cuenta de las "amenazas" que sufre el famoso parque nacional de Doñana como consecuencia del dragado de profundización que planea la Autoridad Portuaria de Sevilla para el tramo navegable del río Guadalquivir, extremo que podría incrementar la salinidad de las aguas de este río.
De hecho, pide asegurar que cualquier actividad de mantenimiento esté "ecológicamente optimizada" y en línea con las recomendaciones de la Comisión Científica que dictaminó sobre el dragado, instando a integrar estas conclusiones en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) como condiciones vinculantes.
Para Juan Espadas, el pronunciamiento de la Unesco refuerza la idea de que "no es posible un dragado de profundización sin garantías medioambientales". "Lo más importante es intervenir y actuar sobre el estuario del Guadalquivir, que es el que está en riesgo. Sólo cuando tengamos certeza de que el estuario está en condiciones, podremos plantear el dragado de profundización", dice Espadas.
Para él, el pronunciamiento de la Unesco constituye "una lección de humildad y prudencia pare el alcalde". Así, ha pedido al alcalde que preste a los pronunciamientos de la Unesco sobre el dragado de profundización del Guadalquivir "la misma atención" que la prestada anteriormente a esta institución internacional a cuenta del conflicto de la torre Pelli, un caso salvado felizmente al no incluir finalmente la Unesco al Alcázar, la Catedral y el Archivo de Indias en la lista del Patrimonio Mundial en peligro.
Zoido insiste en que el dragado y la protección de estuario son "compatibles"
Por su parte, el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha insistido este miércoles en que la realización del dragado de profundización en el río Guadalquivir "no es excluyente, sino perfectamente compatible", con la protección del estuario y su ribera, además de la modernización del regadío, asuntos que "llevan esperando diez años y que no pueden esperar más", por lo que insta a actuar "cuanto antes".
El primer edil hispalense ha dejado claro que la postura defendida por Sevilla, el Estado y el Puerto de Sevilla se centra en la "salvaguarda" del estuario del río, la protección de la ribera, la modernización del riego y, "al mismo tiempo, la realización del dragado con todo garantizado". "No se puede hablar del dragado del río si antes no se ha protegido la ribera y el estuario ni se ha modernizado el regadío", agrega.
Así, insiste en que estos objetivos son "perfectamente compatibles y hay que hacerlos cuanto antes". "Protejamos el estuario y la ribera, garanticemos el regadío con una modernización del mismo y después dragamos el río para poder potenciar la economía sevillana", sentencia.
Zoido señala que se están pidiendo todos los informes que se hayan tenido en cuenta para hacer la resolución y recuerda que hace un año aproximadamente "todo el mundo daba por perdida" la declaración del Real Alcázar, la Catedral de Sevilla y el Archivo de Indias como Patrimonio de la Humanidad y su entrada en la lista de bienes en peligro, algo que insiste en que finalmente no se produjo después de que defendiera "a Sevilla y a los tres bienes, exponiendo nuestras razones y cumpliendo con los compromisos".
En este sentido, ha anunciado que el congreso internacional sobre urbanismo en las ciudades con monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad, un evento que Zoido se comprometió con la Unesco a realizar en la ciudad, tratará también el dragado. "Vamos a aprovechar esa cita para sensibilizar también a todos los implicados con el proyecto del protección del estuario y su ribera, modernización del regadío y el dragado, porque no acabe hablar de unos proyectos sin otros", recalca.
Por último, ha lamentado que "hayan pasado diez años y no esté protegido el estuario, ni modernizado el regadío, por lo que no se puede esperar más". Además, se ha comprometido a eliminar "cualquier tipo de confrontación política, que cada administración cumpla con lo suyo, pero que todos rememos en la misma dirección".