— ¿Cómo valora el colectivo de jueces la sentencia histórica del pasado 14 de marzo del Tribunal Europeo según la cual podrán parar un desahucio cuando consideren que hay cláusulas abusivas y se den una serie de circunstancias?
— Esto se puso ya de manifiesto en el Congreso Nacional de Jueces Decano hace mucho tiempo. Ya habíamos hablado de que había una desproporción en las figuras de las ejecuciones hipotecaria. Con respecto al Tribunal Europeo, me da tristeza que haya tenido que ser un compañero de un juzgado de lo mercantil el que haya tenido que plantear una cuestión perjudicial para que se ponga de manifiesto esto. El tema de todas formas es complejo, no es que a la luz de esta sentencia dictada ya se paralicen los desahucios. Cierto es que es el derecho europeo que hay que incorporarlo al derecho interno español y que como tal vincula, pero esto va a quedar a la libre discrecionalidad de cada órgano jurisdiccional. Ten en cuenta que el procedimiento civil es un procedimiento entre partes donde rige el principio dispositivo, es decir, las partes tendrán que pedirlo y habrá que examinar si existe alguna una cláusula abusiva que haya originado el desequilibrio entre las distintas partes: la posición acreedora y deudora, y cada titular del órgano tendrá pleno criterios a los efectos de llevar a cabo la paralización.
— Queda mucho por hacer entonces pese a este fallo
— El problema que se presenta con la sentencia va a ser diverso. ¿Es una sentencia con efecto retroactivo o no?¿Se puede reclamar una eventual compensación económica o no? Planteo esto porque es lo que está en boga, no cabe la menor duda. Todos los procedimientos que se inicien estando vigente la sentencia dictada por el Tribunal Europeo tendrán que tener en cuenta el fallo y los que estén en marcha serán susceptibles de valoración también. Pero, ¿qué ocurre con los que estén realizados?¿Y si ya han sido expulsados de la vivienda esas personas por ejecución hipotecaria? Se va a plantear una cuestión de si tienen derecho a compensación pero desconozco cual sería el sistema porque es todo es muy incipiente. Existe un proyecto de ley que se tramita en el Congreso que contiene matices de esta sentencia -aunque no la coge en su integridad- como es el tema de las cláusulas abusivas, dación en pago y alquileres sociales... Cada caso va a ser distinto y diferente pero es cierto que hemos avanzado un poquito.
—¿Cómo vive un juez el drama de los desahucios? ¿Intentan matizar o buscar opciones viendo que esto en los últimos años se ha ido de madre? Sólo en Jerez, más de 250 familias perdieron su casa en 2012.
— Como profesional te respondo con un símil: igual que un cirujano que está salvando una vida. Este es mi trabajo. El drama está en cada asunto que llevas, sobre todo en la jurisdicción en la que yo me muevo. Sin perjuicio de que soy juez decano, la jurisdicción de penal es un drama para todo el mundo, con casos de violencia de género, robo con violencia, agresión sexual, homicidio, asesinato...Yo me muevo en una jurisdicción en concreto donde estoy viendo dramas todos los días. Lo vivo con firmeza porque es mi trabajo y tengo que llevarlo de la mejor manera posible. Si te refieres al aspecto humano, no jurisdiccional, obviamente me da pena que exista este tipo de hechos en España y que haya gente que se suiciden a consecuencia de que van a ser lanzados de sus viviendas. Hay que poner los medios necesarios porque se está avisando hace tiempo ya de esta situación de desigualdad que va a conllevar una reforma no solo de la Ley Hipotecaria. La gente se ha olvidado de que lo hay que reformar también es la Ley de Enjuiciamiento civil que también tiene connotaciones que han generado esta situación.
— Se os ve como los malos de la película, aunque quizás en la última etapa esta visión ha cambiado un poco cuando muchos de sus compañeros han criticado expresamente el tema de los desahucios.
— El problema nuestro es que hasta que no empiecen a funcionar los gabinetes de prensa es que siempre hemos sido malos. Nos han puesto como los auténticos demonios de esta historia y realmente lo que hacemos es trabajar con unos sueldos ínfimos que están por debajo de la media europea con muchísima diferencia y con una carga de trabajo brutal. Es increíble como se ha producido una inversión por parte de los medios de comunicación en cierto sentido, a lo mejor por desconocimiento, y se ha llegado a una situación paradójica de que los malos somos realmente nosotros, y nosotros lo que estamos intentando es representar a un poder del Estado, que es el poder judicial, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, atajando cualquier atisbo de desigualdad que se produce, en los juzgados y, por supuesto, trabajando más de lo que debemos trabajar porque trabajamos muchísimo. Es una cosa increíble que en las encuestas que hacen entre los ciudadanos salgamos como un colectivo muy mal valorado cuando realmente existe mucha gente joven con muchas ganas de trabajar. Me entristece, soy un firme defensor de mi profesión y aquí en Jerez no pongo en duda el trabajo constante de todos mis compañeros. Es triste que ocurra esto.
— Sienten en cierta forma que el ministro Gallardón os ha declarado la guerra con estas reforma que ha anunciado
— Yo creo que el problema del ministro es la confusión de lo que es el estado de crisis económica que vive nuestra nación con alguna de las reformas que está planteando amparándose en la situación económica de España. Me parece muy bien que hay que recortar y todo el mundo tiene que abrocharse el cinturón, sin perjuicio de que pueda estar o no de acuerdo porque hay determinadas cosas que no se deben de tocar. Pero, por ejemplo, la reforma del poder judicial y el atentado a la independencia que supone, absolutamente nada tiene que ver conla crisis económica y con las medidas propuestas por ese ministro para salir de esta crisis. ¿Por qué? Lo desconozco. ¿Por qué no se consulta a las distintas asociaciones judiciales? ¿Por qué se está legislando de esa forma tan tremenda? ¿Por qué hemos llegado a esta situación?Pues no lo sé, la realidad es la realidad: recortes laborales, en materia de derechos, modificación profunda de la ley orgánica del poder judicial con un ataque brutal a la independencia del poder judicial..Como se modifique como se pretende por parte del Gobierno probablemente exista una gravísima politización de la justicia y un control desmedido del Ministerio de Justicia por parte del Consejo General del Poder Judicial que podría abocar incluso a la eliminación del tercer poder del estado, y eso si que sería bastante grave.
— Precisamente por estas medidas, jueces y fiscales de todo el país fueron a la huelga hace muy poco. ¿Cómo siguen las cosas?
— La gente está un tanto parada, se está manteniendo contactos, parece que se ha abierto una vía pequeñísima de diálogo a nivel asociativo de las distintas asociaciones de jueces y fiscales con el ministro, pero no ha habido ninguna noticia más. Está un poco parado. El descontento es generalizado y total en toda la carrera judicial y fiscal.
—Y en el caso de Jerez quedó visible en la respuesta a los últimos paros convocados
— Sí, pero lo que pasa es que la gente tiene que seguir trabajando aunque esto cada vez es peor.
—Otra de las reformas de Gallardón está enfocada hacia el Registro Civil y permitirá la posibilidad de que los notarios casen por lo civil previo pago de unos 100 euros aproximadamente—El inconveniente que veo de la eliminación del Registro Civil y de su clara vinculación a un juzgado de primera instancia es el tema de que si se lleva a otro tipo de ámbito como el notarial o el registral, el problema va a venir con la ejecución. De momento todo es muy bonito, me casa el notario, me divorcio de mutuo acuerdo el notario, pero, ¿y si ese divorcio genera complicaciones?¿Al notario se le van a atribuir competencias jurisdiccionales para solventar litigios que se vayan produciendo entre esas personas? El tema esta ahí, llámese notario o registrador. Creo que extrapolar de los juzgados civiles el Registro Civil para dárselo a otro tipo de colectivo a lo mejor no es la solución más idónea para agilizar la administración de la justicia. La verdad es que todo es difuso. Porque ahí se habla de atribuciones competenciales en la Dirección General del Registro del Notariado…se habla también de los registros... Eso está todavía por ver, está también la Ley de Jurisdicción Voluntaria, que no termina de ver la luz, se habla del nuevo código procesal penal, la nueva instrucción por parte del Ministerio Fiscal... La realidad es que se está moviendo pero ahora mismo es lo que tenemos.
—Vayamos a otro frente, la Ley de Tasas. Ya ha habido varias protestas ante los juzgados de Tomás García Figueras
—Vemos injustísima esta Ley de Tasas porque no se puede vulnerar el principio de acceso a la administración de la justicia y el principio de la igualdad a los ciudadanos con la constitución que tenemos. No se puede impedir el acceso a la gente, ya se han ido consiguiendo a pasos agigantados algunas mejoras en la violencia genero, la justicia gratuita en materia civil, en el procedimiento penal que nunca se tocó. Pero realmente la tasa que ha propuesto este ministerio es excesiva. Los expertos que lo han analizado dicen que la solución con esta reforma es insignificante. Por ejemplo, si con una multa de 400 euros me tengo que gastar 150 para reclamar yo no voy a reclamar. Mi punto de vista, y el que propugnamos los jueces decanos es una tasa disuasoria, de 30 ó 20 euros, una cuantía mínima.
—¿Pero hay tantos recursos en los juzgados como para que sea necesaria una tasa disuasoria?
-Que si había más recursos de lo debido? A lo mejor sí ha existido un abuso. Pero ten en cuenta que hay que confrontar dos pilares : el acceso a la justicia de todos los ciudadanos, que no se puede vulnerar con una ley de tasas excesiva, y luego también que siempre ha habido abusos, tanto en la utilización de los procedimientos civiles y penales cuando a lo mejor era necesario otras vías menos gravosas para los ciudadanos. Siempre se ha escuchado el dicho de más vale un mal acuerdo que un buen pleito. Probablemente haya habido un exceso de abuso, todo el mundo recurre, la jurisdicción penal de oficio es el cuento de nunca acabar, siempre se está recurriendo. A lo mejor sería conveniente modificar los códigos procesales más que hacerlo a través de la imposición de una tasa.
—Pero a raíz de la última concentración, en la que los jueces se desmarcaron con una rueda de prensa, parece que jueces, procuradores, abogados y fiscales no están precisamente muy unidos en este último frente ni en otros
— No es desunión, el problema es que a los abogados y los procuradores, les afecta las tasas, evidentemente, porque ellos cobran de ahí y van a ver disminuida la entrada de sus clientes. A mí como poder judicial me va a pagar el Estado pero se está dando un desequilibrio y aunque la consideramos excesivamente injusta, no es mi guerra. No es que no vea que es una cuestión justa y correcta, la veo injusta y desmedida pero no es nuestra guerra. Apoyamos su reivindicación, pero la huelga de los jueces no es por las tasas, se han mezclado los conceptos y las opiniones, no se ha preguntado de forma tranquila a las distintas partes ni se ha interrelacionado. Los jueces tienen unas reivindicaciones clarísimas, y los abogados y procuradores tienen otra. Yo también considero que la ley de tasas es injusta y a lo mejor los abogados entienden que con esta modificación de la Ley del Poder Judicial el tercer poder del Estado, que es el poder judicial está en grave peligro, son distintos puntos de vista. Estamos unidos, pero no en la reivindicación. El hecho de tomar esa determinación fue una decisión del colectivo global de todos los magistrados de Jerez, Algeciras y la sierra. Se tomó esa decisión por el descontrol que se produjo la primera en la que el tema se fue de las manos.
—¿Cómo están las cosas en los juzgados de Jerez ahora mismo?
— Hacen falta más jueces, necesitamos otro juzgado de lo social, ahora todo está en el candelero, los de primera instancia están desbordados... Es que esto es de locos. La carga de trabajo es excesiva, todos estamos por encima de módulos, con independencia de la jurisdicción. Esto es muy elevado, llevo casi año y medio en los señalamientos, van entrando y todavía tengo que empezar a celebrar el 2012 y estoy en 2013. El Consejo General del Poder Judicial me dice usted debe poner 420 sentencias al año y resolver 600 ejecuciones, que son 1.000 asuntos, y yo estoy resolviendo 2.000. No se puede puede hacer más porque entra más de lo que puede asimilar el propio órgano judicial y ya no hay días en el calendario para celebrar juicios. Los números se han disparado y la carga de trabajo asumida por cada juez es tremenda.
—En los casi 10 años que lleva como juez decano, ¿son estos los peores tiempos que le ha tocado vivir?
— Son los peores tiempos porque cuando entré fue una cantidad de éxito: consecución de órganos judiciales, inversiones, reformas. Se estuvo a punto de llegar a un acuerdo para la Ciudad de la Justicia... Obviamente, como diría la canción, son malos tiempos para la lírica, malísimos.
—Hablaba de la Ciudad de la Justicia después de tanto debate en su día para su ubicación, lo cual ahora es secundario,¿es un proyecto utópico o al que han renunciado?
— Utópico no, pero está Cádiz delante. En la última reunión que mantuve en diciembre en Granada cuando tuvimos Pleno, el consejero nos dijo que no hay recursos económicos y que si se iniciara alguna en la provincia, en la que además de Jerez, también están esperando Cádiz y Algeciras, sería en Cádiz. Me lo dijo así de claro. Me consta y me han comentado que en el momento que tengan un poco de respiro económico, se podrá cuando menos acometer o continuar la reforma en el edificio de Tomás García Figueras que proyecta echar abajo el juzgado de guardia para mejorar las instalaciones, crear un salón de reuniones y punto de apertura donde esta servicio común, pero para eso hace falta dinero y ahora mismo no hay".