Era algo más que un rumor. De hecho, si había alguna duda, no era que si se iba a suprimir una administración pública, si no cuál, ¿las diputaciones provinciales o las mancomunidades de municipios? La respuesta la ofreció el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, quien anunció el miércoles que el Estado suprimirá todas las mancomunidades, y aprovechó el momento para volver a recordar que las Diputaciones asumirán las competencias de aquellos ayuntamientos que no cumplan la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
En la provincia hay cinco mancomunidades de municipios. Campo de Gibraltar, La Janda, Bahía de Cádiz, La Sierra y Bajo Guadalquivir, ésta última disuelta por insolvencia económica, situación en la que prácticamente se encuentran todas, con programas aprobados pero que no están en marcha por no contar con asignación presupuestaria.
La incertidumbre sobre el futuro de este ente supramunicipal ya se había instalado en las sedes de estas cinco mancomunidades. Por ejemplo, ayer Lucía Torrejón, presidenta de la Mancomunidad de la Janda, decía a este medio que “desde hace tiempo se viene hablando de este tema, pero creo no son formas de anunciar una decisión que afecta a tantas personas y servicios”. Y es que para Lucía Torrejón es “absolutamente necesario” que “acompañando a este anuncio se perfile un esquema de cómo se piensa afrontar este proceso”.
Y aquí reside ahora la pregunta, ¿cómo se llevará este proceso acabo?, ¿quién asumirá las competencias que queden vacantes? ¿Qué pasará con sus empleados?. En este sentido, una empleada de la Mancomunidad jandeña, que prefiere el anonimato, señaló que “somos muchas las familias que trabajamos y dependemos de estas administraciones. Antes de lanzar la noticia así, deberían haber hablado para explicar cuáles son sus planes”. “Se trata de una racionalización que traerá importantísimos ahorros que se cuantificarán en el momento en el que se termine de cerrar la negociación política”, señalado Beteta durante el anuncio. Eso sí, no dudó en advertir que n el caso de que no haya acuerdo, “se hará de todos modos”. Por lo tanto, las mancomunidades se cerrarán.
