Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Patrulla del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) del puesto principal de Tarifa han imputado a dos personas como presuntas autoras de un delito de maltrato animal, por mantener a varios perros en unas "rudimentarias" instalaciones donde no les ofrecían ni comida, ni agua, ni asistencia veterinaria.
La investigación, según ha explicado el Instituto Armado en un comunicado, se inicia tras la denuncia presentada por una persona de que en unas perreras situadas en las cercanías del cementerio de Tarifa se encuentran varios perros hacinados en unas instalaciones "rudimentarias", produciéndose un abandono de animales que están poniendo en grave peligro sus vidas. Encontraron dos cachorros cadáver, y trasladaron a otros tres cachorros que se encontraban "en muy mal estado físico" a una clínica veterinaria, donde murieron después en 24 horas.
Por tales hechos, los agentes inician una investigación, y unen otra denuncia presentada por una protectora de animales. Tras identificar a las personas que albergaban a los animales en las perreras, les imputan un delito de maltrato animal con el resultado de muerte "al no dispensar comida, ni bebida, ni la asistencia veterinaria preceptiva"; pasando posteriormente a disposición de la autoridad judicial.
