El magistrado ha incorporado a la causa el auto de la Sección Cuarta que reabre la causa para Bárcenas, el exdiputado Jesús Merino, y el exconcejal en Estepona (Málaga) Ricardo Galeote. Ha remitido el escrito a Suiza para que conste de forma oficial que la investigación se ha reanudado por lo que las pesquisas sobre los fondos del exsenador en este país vuelven a ser necesarias.
Pedreira había remitido una comisión rogatoria a este país para solicitar esta información pero las autoridades suizas la dejaron sin efecto tras el posterior sobreseimiento decretado por Ruz.
Así, el juez central de instrucción número 5 ordena en un auto hecho público este viernes que "se ponga en conocimiento" de Suiza la decisión tomada ayer por la Audiencia Nacional y concreta, "en lo referente a la comisión rogatoria actualmente en trámite".
Por otra parte, la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal ha ordenado que se traduzca íntegramente la totalidad de la documentación que fue remitida por las autoridades de Suiza a petición del juez Antonio Pedreira, que vinculó esta negativa a la "paralización del procedimiento" contra Bárcenas, Merino y Galeote.
La Sala acoge de esta forma un recurso de apelación presentado por la defensa del cabecilla de la trama, Francisco Correa, contra el auto acordado por Pedreira el pasado 20 de octubre de 2011 en el que consideraba que no había lugar la traducción de la totalidad de la documentación, "sin perjuicio de aquella que afectara directamente a su defensa".
El abogado de Correa, José Antonio Choclán, presentó un escrito en el que solicitaba que la documentación se uniera a las actuaciones y se llevara a cabo la "íntegra traducción de todos y cada uno de los documentos recibidos, sin excepciones, y sin que proceda arbitrar un traslado inexistente en la ley procesal penal ni civil para la delimitación de los folios a traducir".
Los magistrados Ángela Murillo, Teresa Palacios y Carmen Paloma González entienden, en consonancia con el criterio de la Fiscalía, que "difícilmente puede hacerse una labor de parcelación de cuál sea la documentación de su interés sin conocer previamente, tras la oportuna traducción, su contenido".
El tribunal también rechaza que la traducción íntegra de la documentación ponga en riesgos los principios de "seguridad jurídica e interpretación", como defendió Pedreira, y añaden que su expresión "no se entiende muy bien" salvo que se refiera a la inclusión de información económica como extractos de movimientos bancarios sobre los que no era necesaria realizar la traducción.