El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha aplazado la vista para revisar la sentencia de la Audiencia de Málaga que, tras un veredicto de culpabilidad, condenó a 24 años de prisión al exmarido de Lucía Garrido, hallada flotando, con golpes y un corte en la yugular en la piscina de su finca de Alhaurín de la Torre (Málaga) en 2008.
El TSJA tenía previsto celebrar la vista el próximo 26 de junio pero se ha aplazado para el 17 de julio por coincidencia con otro juicio de uno de los abogados que habían señalado antes, según han informado a EFE fuentes judiciales.
El procesado fue condenado el pasado noviembre como autor, en concepto de cooperador, de un delito de asesinato sobre su mujer, y también se condenó a 22 años de cárcel al autor material, el presunto sicario, según la sentencia a la que tuvo acceso EFE.
La defensa de los dos acusados se mostró disconforme con la sentencia, por lo que recurrió al estimar que se habían vulnerado derechos fundamentales. De forma subsidiaria el abogado del exmarido solicitó la nulidad del juicio y su repetición.
El Tribunal Superior de Justicia en Andalucía, con sede en Granada, será el encargado el próximo miércoles de celebrar una vista a las 10.30 horas para ver dichos recursos de apelación contra la sentencia, según han informado a EFE fuentes judiciales.
El exmarido de Lucía Garrido, que quiso renunciar a su abogada antes de la celebración de la vista oral y pidió unos días para asignar un nuevo letrado, ha vuelto a ser defendido por Guillermo Smerdou, que en el primer juicio, celebrado en 2019, ostentó su defensa cuando un jurado popular lo consideró no culpable y salió absuelto de los mismos hechos.
Piden que se dicte una nueva sentencia
En el recurso de apelación, al que ha tenido acceso EFE, se pide que se dicte una nueva sentencia y se le absuelva ya que su abogado mantiene que se ha producido una vulneración de derechos fundamentales a la presunción de inocencia.
Subsidiariamente, pide que se decrete la nulidad del juicio en base a numerosos motivos de nulidad que alega en el recurso, de casi sesenta folios.
Entre los motivos que alega se refleja que su cliente quiso renunciar a la anterior abogada antes del juicio y solicitó unos días para asignar uno nuevo y que la letrada antes de comenzar la vista oral advirtió de que su cliente no quería que lo representara y que "ni le hablaba".
Pese a ello, el juez no lo permitió y tampoco quiso esperar a que el Colegio de Abogados se pronunciara y le asignara uno nuevo, por lo que "se ha visto en una situación de indefensión con una falta absoluta de tutela judicial efectiva por parte del magistrado presidente y se le ha denegado el derecho a la libre elección de letrado", asegura.
"No se puede hablar de que tuvo una defensa efectiva ya que a la letrada se le obligó a actuar en contra de su voluntad", se destaca en el recurso, por lo que se insiste en que hay que decretar la nulidad del juicio y ordenar su repetición.
Otro argumento esgrimido en el recurso es que durante el juicio se citó en calidad de perito a dos guardias civiles, que están procesados por falso testimonio por presuntamente mentir en el primer juicio según el fiscal, y estos se acogieron a su derecho de no declarar pese a que "era una prueba fundamental".
El recurso también recoge una serie de hechos probados según el jurado, que para el letrado no lo están, ya que "no pueden serlo por una creencia sino por la existencia de pruebas convincentes y concluyentes", algo que a su entender no ha ocurrido, como la contratación de un sicario que maltratara a su exmujer y que dentro de la finca se realizaran actuaciones ilícitas.
La sentencia estableció como hechos probados, conforme al veredicto del jurado, que Lucía "se convirtió en testigo directo y presencial de las actividades lícitas y supuestamente ilícitas" que el exmarido realizaba y "suponía un obstáculo" para que él pudiera llevar a cabo sus negocios, así como que a finales de marzo de 2008 se urdió un plan para matarla.