Estefanía Durán López se confiesa una mujer activa socialmente. Y de ese conocimiento de su ciudad y su vecindad nace al tiempo su inquietud desde la política por un Arcos mejor. Trabajadora en las empresas de su padre, todos los días acude a su despacho jurídico en la avenida Muñoz Vázquez para declaraciones de renta –está en plena campaña- y al unísono atender los asuntos de las comunidades de vecinos y otros que se trae entre manos; trabajo que tiene necesariamente que conciliar con el hogar y las atenciones que requiere su hijo de cuatro años, aunque el segundo viene de camino... Aficionada al mundo taurino –su esposo trabaja en el sector– y defensora a ultranza de las tradiciones, se perfila como alcaldesa de Arcos de la mano de Vox.
Creo que llegó al proyecto de Vox hace dos años, un tiempo donde ha adquirido experiencia y un mayor conocimiento, si cabe, de la ciudad. ¿Cómo fue este paso en su vida?
Me inicié en marzo de 2021 siendo coordinadora local Maravillas Collantes. También estaba en el proyecto mi compañera diputada autonómica Blanca Armario. Me nombraron coordinadora de la Sierra de Cádiz y empecé a contactar con los municipios y buscar a su vez a los futuros coordinadores de las localidades: Ubrique, Villamartín, Bornos… El comité provincial me propuso para el comité nacional y éste dio el visto bueno para que me convierta en candidata a la Alcaldía. Me lo pensé mucho, la verdad, porque era un paso muy importante, y más teniendo un hijo de cuatro años, pero al mismo tiempo tenía el apoyo de mis padres y toda la familia. Procuro, como se suele decir, llevarlo todo para adelante.
¿Cómo ha sido esa experiencia comarcal?
La Sierra no tiene nada que ver con La Janda y otras comarcas. El asentamiento de Vox ha sido un poco más complicado, ha habido localidades que han aceptado mejor que otras el proyecto de Vox, dependiendo mucho de su idiosincrasia, de su historia política, de su carácter socioeconómico… La Sierra es una comarca de contrastes y hay personas a las que les cuesta aún posicionarse públicamente en política. Estamos muy satisfechos con los resultados en las últimas elecciones autonómicas donde Vox subió en casi todas las localidades de la Sierra. Recuerdo por ejemplo el caso de Olvera.
¿Dónde cree que radica esa aceptación de Vox? Es un partido relativamente joven todavía en la zona.
Vox habla claro y todo el mundo sabe qué defiende el partido. Hay medidas generales a nivel nacional pero que son extrapolables a los municipios. Tenemos gran vocación de país y tenemos muy claro cuáles son nuestros principios. Plasmamos por escrito nuestro compromiso con el electorado y eso nos diferencia de otros partidos.
¿Cómo ve la realidad de Arcos? ¿Qué le preocupa de la ciudad y qué denota que preocupa a sus vecinos y vecinas?
Admito, aunque sea en el terreno personal, que la experiencia del Covid que tanto afectó al trabajo de mi marido, taurino de profesión, me empujó a una reflexión sobre cómo quedamos a veces desamparados por el propio sistema. Sé que la ministra era antitaurina, pero se concedieron ayudas a todos los sectores para que salieran adelante, a la cultura, a las fiestas… Sin embargo, para el mundo del toro, nada de nada. Pensé que era algo injusto. Dicho esto, creí que podía aportar mi granito de arena para cambiar las cosas. Tengo ganas de cambiar la realidad de Arcos, tengo un buen equipo y aportaremos savia nueva. Arcos necesita un cambio radical, comenzando por un nuevo Plan General de Ordenación Urbana que regule zonas, que cree empleo, que incentive al empresariado y fomente el turismo, entre otros objetivos para levantar económicamente la ciudad. El PGOU no se actualiza y ahora no refleja la realidad de la ciudad. También considero importante facilitar la tramitación administrativa a los empresarios y a las personas en general. Hay trámites que se eternizan en el Ayuntamiento.
¿Qué opina de otros aspectos de la gestión pública que suelen preocupar a los vecinos y vecinas: limpieza pública, seguridad…?
En Arcos tenemos un grave problema en el casco antiguo que poco a poco se está despoblando. Hay un tema grave de ocupación de viviendas y se está echando a los vecinos de algún modo de su propio barrio. Esta zona requiere un plan específico para devolverle vida. Es preciso mejorar la seguridad tras los episodios de robos que hemos vivido. Hay otras deficiencias en la localidad como la falta de parques infantiles. Algunos parques están proyectados desde hace años pero sin embargo no se ejecutan. Un ejemplo lo tenemos en la Cuesta de la Rosa, donde vivo actualmente. Sé lo que significa ser una vecina rural. En mi barriada tenemos un grandísimo problema con la falta de agua potable debido a la presión, y bebemos de un pozo de la comunidad, la cual también se hace cargo del arreglo del camino de acceso y otros servicios. Sin embargo, pagamos nuestros impuestos. El Charcón está en la misma situación, con una toma de agua desde la que se podría conectar una tubería. Sin embargo, se cargan las cubas de agua para la población con el consiguiente aumento del gasto económico. No lo entiendo. Lo comento como algo común al resto de las barriadas rurales, donde los vecinos pagan impuestos y no reciben los mismos servicios. Tampoco se ha atajado el problema de la regularización de viviendas en las zonas rurales.
Vox ya se ha posicionado respecto al proyecto ‘Arcos, ciudad amable’ para mostrar su oposición. También próximamente se van a reunir con la vecindad de La Verbena. Hablamos, en suma, de dos asuntos claves en la actualidad del municipio…
Respecto al ‘Ciudad Amable’, el proyecto rompe con la tradición y en ese sentido Vox lo tiene claro. Somos defensores del patrimonio y de las tradiciones y este proyecto rompe ambas cosas. De La Verbena, pienso que es una barriada en ruinas y que se podría haber gestionado viviendas para los vecinos en otros lugares de Arcos. Esto es algo que piensan muchos vecinos de Arcos pero que nadie dice públicamente. Es una pena el tira y afloja de tantos años entre la Junta de Andalucía, Diputación, el Estado, el Ayuntamiento… y nunca de ponen de acuerdo. Al final, los grandes sufridores son los vecinos, muchos de los cuales pagan hipotecas aun viviendo fuera de sus casas. Creo que se está tirando mucho dinero y eso es una barbaridad. De todos modos, es algo muy complejo. Ahora vamos a tener una reunión con los vecinos para saber qué opinan de todo esto.
¿Cuál es el proyecto de Vox en cultura, fiestas…?
Nos encantaría que Arcos tuviera una plaza de toros multifuncional, con locales comerciales y otros servicios, y que pudiera ser un recinto de conciertos y eventos. Creo que en Arcos hay afición y sería un proyecto bonito. Otras localidades sin el potencial poblacional de la nuestra tienen infraestructuras para celebrar acontecimientos: ferias gastronómicas, eventos ecuestres… Tampoco tenemos un recinto ferial acorde a las necesidades. Son proyectos que contemplaremos en nuestro programa electoral, el cual estamos diseñando con la opinión de los vecinos de Arcos.
¿Cómo vive esta ya casi campaña electoral? Su relación con el resto de candidatos, con las asociaciones y colectivos.
Me encanta salir a la calle y que la gente me cuente sus necesidades. A veces peco de excesiva empatía, me considero muy sociable y en este sentido congenio con todo el mundo. Veo a mis compañeros candidatos por la calle y nos saludamos. Nos respetamos por encima de nuestras ideologías, y creo eso, que el respeto debe estar por encima de todo.